GRACIAS

Gracias por haber compartido los tres últimos años de tu vida a mi lado,

gracias por acallar con tus silencios mis rabietas, por esconder el rostro debajo de la playera cual niño pequeño siendo reprendido cada vez que sabías que habías errado,

gracias por ser un alma de niño y cuidar de mi como un adulto.

Gracias por darle una luz a mi vida, por haberte encontrado en mi camino pero sobre todo por haberte quedado en él, gracias amor por ser mi guía.

Gracias por seguir siendo mi fuerza más allá de las barreras de la muerte, 

por la paz con que me abrazas en mis noches de desconsuelo,

por dejarme sentirte cerca aunque mis ojos no te vean, 

por la sonrisa que me regalas cada mañana después de visitarme en mis sueños.

Gracias amor por haberme mostrado que a veces una vida tiene más sentido cuando se trunca porque quizá su destino era mostrar algo más allá de lo que apenas intento entender. 

Gracias por seguir cuidándome, por dejarme respirar tu aroma en el viento, por contestar a través de ecos mis preguntas, gracias amor por amarme, por haberme permitido conocer la nobleza de tu alma.